El Bono Social de la Electricidad es una política pública crucial en muchos países, diseñada para garantizar el acceso a la energía eléctrica a los hogares más vulnerables de la sociedad. Esta iniciativa busca aliviar la carga económica que representa el suministro de electricidad para las familias de bajos ingresos, así como promover la eficiencia energética y la sostenibilidad en el sector eléctrico.
En este artículo, exploraremos en detalle el Bono Social de la Electricidad, examinando su origen, sus objetivos y su impacto en la vida de aquellos que se benefician de él. También analizaremos su relevancia en el contexto de las políticas energéticas y medioambientales, así como las implicaciones económicas y sociales que conlleva. Al comprender mejor este instrumento de política pública, podremos apreciar su importancia en la búsqueda de un suministro eléctrico más equitativo y sostenible para todos.
65% de bonificación en el consumo
¿Qué es el bono social?
El bono social de electricidad es un programa que ofrece descuentos en la factura eléctrica a ciertos grupos de consumidores. Los descuentos varían según la vulnerabilidad de los usuarios y se aplican de la siguiente manera:
- Consumidores vulnerables que cumplan con los requisitos establecidos: Se les ofrece un descuento del 25% en su factura eléctrica, aunque de manera excepcional, hasta el 31 de diciembre de 2023, este descuento se incrementa al 65%.
- Consumidores vulnerables severos que cumplan con los requisitos establecidos: Se benefician de un descuento del 40% en su factura eléctrica, y excepcionalmente, hasta el 31 de diciembre de 2023, este descuento se aumenta al 80%.
Además, si el usuario se encuentra en riesgo de exclusión social y está siendo atendido por los servicios sociales de una administración autonómica o local que cubre al menos el 50% de la factura eléctrica, no tendrá que pagar la factura eléctrica. En caso de dificultades temporales para realizar el pago, el suministro eléctrico no se interrumpirá.
Este programa se conoce como el «Bono eléctrico de justicia energética» y está respaldado por el Real Decreto-ley 18/2022, de 18 de octubre. El artículo 10 de este decreto establece la aplicación temporal del bono social de electricidad hasta el 31 de diciembre de 2023, dirigido a hogares con bajos ingresos que se ven particularmente afectados por la crisis energética, proporcionándoles un descuento del 40% sobre el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) en sus facturas eléctricas.
Requisitos para solicitarlo
1.- Tener contratado el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) en la vivienda habitual
El Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) es el acuerdo eléctrico establecido por las autoridades gubernamentales. Bajo este plan, el monto a pagar por la electricidad consumida se determina directamente a partir del precio de la energía en el mercado, al que se suman los impuestos y los costos regulados, sin incluir servicios o productos adicionales. Es importante señalar que el PVPC solo está disponible para aquellos que tengan una potencia contratada igual o menor a 10 kilovatios (kW) y debe ser contratado a través de las comercializadoras designadas por el Gobierno.
2.- Además de tener contratado el PVPC se debe cumplir con los siguientes requisitos personales, familiares y de renta
Para ser consumidor vulnerable (25% de descuento excepcionalmente y hasta el 31 de diciembre de 2023 descuento del 65%) se debe cumplir alguno de los siguientes requisitos:
- El ingreso anual del solicitante o del conjunto de personas que comparten la vivienda debe ser igual o menor que 1,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) en su modalidad de 14 pagas. Si la unidad de convivencia consta de más de un miembro, se aumentará este umbral en 0,3 por cada miembro mayor de edad adicional en la unidad y 0,5 por cada menor de edad.
- También se puede acceder al bono social si se posee el título de familia numerosa.
- Otra opción es que el solicitante o todos los miembros de la unidad de convivencia sean pensionistas del Sistema de la Seguridad Social, ya sea por jubilación o incapacidad permanente, y perciban al menos la cuantía mínima estipulada en cada momento para dichas categorías de pensión. Además, no deben recibir ingresos totales que superen los 500 euros al año.
- Por último, se puede ser elegible si el solicitante o algún miembro de la unidad de convivencia es beneficiario del Ingreso Mínimo Vital, de acuerdo a lo establecido en la Ley 19/2021, de 20 de diciembre.
Para ser consumidor vulnerable severo (40% de descuento excepcionalmente y hasta el 31 de diciembre de 2023 descuento del 80%) se debe cumplir alguno de los siguientes requisitos:
- La renta anual percibida no debe superar el 50% de los umbrales establecidos para la condición de consumidor vulnerable, incluso teniendo en cuenta los incrementos previstos en casos de «circunstancias especiales».
- Si se ostenta el título de familia numerosa, la unidad de convivencia debe tener una renta anual igual o menor a 2 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) en su modalidad de 14 pagas, lo que equivale a 16.800 euros.
- Si el consumidor o todos los miembros de la unidad de convivencia perciben la pensión mínima y no tienen otros ingresos cuya suma anual supere los 500 euros, entonces la renta anual de la unidad de convivencia debe ser igual o inferior a 1 vez el IPREM de 14 pagas, que es de 8.400 euros.
- Si el consumidor o algún miembro de su unidad de convivencia es beneficiario del Ingreso Mínimo Vital, se aplicarán los criterios de renta establecidos en el primer punto, es decir, la renta anual debe ser igual o inferior al 50% de los umbrales definidos para los consumidores vulnerables.
Para ser consumidor en riesgo de exclusión social, el titular del contrato debe satisfacer los requisitos establecidos para ser considerado un consumidor vulnerable severo. Además, es necesario que esté siendo asistido por los servicios sociales de una Administración Pública (a nivel autonómico o local) que cubran al menos el 50% del monto de su factura correspondiente al Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC). En situaciones de dificultad temporal para afrontar el pago, se garantiza que el suministro eléctrico no se verá interrumpido.
Para acogerse al bono social de justicia energética (hasta el 31 de diciembre de 2023 descuento del 40%), es necesario que los consumidores que sean titulares de un contrato de suministro eléctrico en su vivienda principal estén acogidos al PVPC, además de cumplir con ciertos requisitos de ingresos.
La renta anual del titular o, en caso de una unidad de convivencia, la renta conjunta anual de dicha unidad debe ser igual o inferior a 2 veces el IPREM de 14 pagas (16.800€) y superior a 1,5 veces el IPREM de 14 pagas (12.600€). Se aplican multiplicadores de renta para unidades de convivencia con miembros adicionales y menores de edad. Para solicitar el bono social, el consumidor debe enviar una solicitud al comercializador de referencia con la documentación requerida. Los beneficiarios del bono eléctrico de justicia energética no son elegibles para el bono social térmico.
¿Cómo se puede solicitar?
Para solicitar el Bono Social, tienes la opción de comunicarte con las comercializadoras de referencia, como Endesa. Estas empresas desempeñan un papel crucial en la administración de este programa de asistencia energética. A continuación, se describen con mayor detalle los canales de comunicación que puedes utilizar:
- Teléfono: Puedes llamar a la comercializadora de referencia correspondiente para obtener información sobre el proceso de solicitud y recibir asistencia personalizada. Un agente te guiará a través de los pasos necesarios y te proporcionará detalles sobre los documentos requeridos.
- Correo Electrónico: Otra opción es enviar un correo electrónico a la comercializadora. En este correo, puedes solicitar información sobre el Bono Social y expresar tu interés en aplicar para este programa. La empresa te responderá y te indicará los siguientes pasos a seguir.
- Correo Postal: También puedes enviar una solicitud por correo postal. Las comercializadoras de referencia proporcionarán formularios de solicitud que puedes completar y enviar por correo. Asegúrate de incluir todos los documentos necesarios y seguir las instrucciones proporcionadas.
- Fax: Algunas comercializadoras de referencia también aceptan solicitudes por fax. Puedes enviar la documentación requerida por esta vía, asegurándote de que se reciba correctamente.
Estas comercializadoras de referencia asumen la responsabilidad de ofrecer el Bono Social a quienes cumplen con los requisitos necesarios, así como de financiar este programa destinado a ayudar a los consumidores con bajos ingresos a afrontar los costos de la electricidad. La tramitación del Bono Social a través de estas compañías te brindará el apoyo necesario para acceder a este beneficio, lo que a su vez contribuirá a aliviar tu carga financiera en lo que respecta a la factura eléctrica.
Otros beneficios
El Bono Social de electricidad brinda múltiples ventajas a los consumidores, destacando su enfoque en la transparencia y la protección de los hogares vulnerables. Algunas de las características más notables del Bono Social incluyen:
- Facturación Transparente: Una de las principales ventajas del Bono Social es la transparencia en las facturas eléctricas. En lugar de facturas con «letra pequeña» y cargos ocultos, el costo de la electricidad consumida se presenta de manera directa y clara en el desglose. Esto significa que los beneficiarios pueden comprender fácilmente cuánto están pagando por la energía, impuestos y peajes, sin sorpresas ni costos adicionales relacionados con otros servicios o productos.
- Plazos Ampliados para Facturas Impagadas: El Bono Social también otorga un período de gracia más extenso a los beneficiarios que enfrentan dificultades para pagar sus facturas eléctricas. Después de un lapso de 4 meses desde la primera notificación de impago, se activa el Suministro Vital (SV) durante un período de 6 meses. Durante este tiempo, el suministro eléctrico permanece intacto, lo que brinda a los beneficiarios la oportunidad de regularizar sus deudas. En contraste, el plazo general para otros consumidores es de tan solo 2 meses desde la primera notificación de impago, lo que puede poner en riesgo la continuidad del suministro.
- Protección para Familias Vulnerables: Además, el Bono Social se centra en proteger a las familias en situación de vulnerabilidad. En los hogares beneficiarios del Bono Social, se prohíbe la interrupción del suministro eléctrico debido a impagos en ciertas circunstancias. Por ejemplo, si en la unidad familiar reside al menos un menor de 16 años o si el consumidor o algún miembro de su familia tiene una discapacidad igual o superior al 33%, o si tienen un grado de dependencia II o III, certificado por los servicios sociales de las Administraciones Públicas competentes, se garantiza que el suministro no se cortará en caso de dificultades temporales para pagar la factura eléctrica.
Estas características hacen que el Bono Social de electricidad sea una valiosa herramienta de apoyo para las personas y familias que enfrentan desafíos económicos o situaciones de vulnerabilidad, proporcionando un alivio significativo en términos de costos de electricidad y seguridad en el suministro eléctrico.